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jueves, 14 de noviembre de 2013

Las ventas para obra pública y cemento siguen marcando mínimos históricos


Las cifras de ventas de maqunaria de obras públicas siguen en descenso, buscando suleo desde el que iniciar el rebote, según la Asociación Nacional de Distribuidores e Importadores de Máquinas de Obras Públicas, Minería y Construcción (Andicop). Lo mismo puede decirse de las cifras de producción y consumo de cemento, que recopila  la patronal cementera Oficemen.

Lo poco salvable de las cifras de ventas de maquinaria para obras públicas y construcción es que tienen difícil seguir bajando, tras unos años de continua caída. Las cifras que ofrece Andicop se centran en las ventas de maquinaria para movimiento de tierras y construcción de carreteras, que son históricamente bajas. Respecto a la maquinaria específica de minería, sus datos se remiten únicamente a los grupos móviles de trituración y cribado sondeados en una parte del mercado, y señalan una atonía en las ventas de estas máquinas habituelmente ligadas a la obra pública. Respecto a otro tipo de maquinaria e instalaciones propias de la minería, no existe una patronal que ofrezca datos, pero nuestra impresión -hablando directamente con  diferentes empresas - es que la situación es menos crítica. Las ventas están siendo escasas, ciertamente, pero el mercado no se ha detenido en cuanto a maquinaria de vibración, equipos de trituración y cribado, e instalaciones de ransporte de materiales. Por otra parte, las aperturas y amplaiciones de instalaciones mineras que están arrancando pueden ayudar a mejorar sensiblemente esta situación.   

Cemento

El consumo de cemento en los nueve primeros meses del año ha sido de 8,3 millones de toneladas de cemento, lo que representa una caída del 22% respecto al mismo periodo de 2012. En septiembre, el consumo doméstico cayó hasta las 947.170 toneladas, lo que supone un descenso del 9% en relación al mismo mes del pasado ejercicio. 

En este contexto, de mantenerse las partidas destinadas a obra pública que se recogen en el Proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado, y que suponen un descenso de las inversiones en infraestructuras del 60% respecto a 2009, las cementeras españolas continuarán viviendo una prolongación de la crisis del sector en 2014, con nuevas caídas del consumo de cemento. Esta situación resultaría inasumible para una industria que lleva seis años consecutivos viendo cómo se penaliza a la construcción y cómo se desploma el mercado doméstico hasta cifras propias de países en vías de desarrollo.

“Los continuos recortes de las inversiones en obra pública son un mazazo para la actividad y los puestos de trabajo del sector de la construcción, una industria que ha sido generadora de riqueza y empleo en nuestro país y un referente de eficiencia a nivel mundial”, ha declarado el director general de Oficemen, Aniceto Zaragoza. “Según datos de Eurostat, en 2013 España será el país de la UE con menor ratio de inversión pública sobre el PIB, atendiendo a su superficie y población, un 51% inferior a Alemania y un 60% inferior a Reino Unido; y las cifras previstas para 2014 son aún peores”, concluye Zaragoza.