El crecimiento acumulado del consumo de cemento en los nueve primeros meses del año se ha situado en un 4,8%, lo que supone un retroceso de casi cuatro puntos frente al cierre del primer semestre, cuando crecía a un ritmo del 8,6%. La caída de la obra pública está frenando la recuperación que se atisbaba en julio y previsiblemente impedirá que el sector cumpla con sus previsiones de mejora para 2015.
Más del 4%
Según las estimaciones de ANEFA, el año 2015 se ha cerrado con un ligero crecimiento de algo más del 4%, para un consumo total del entorno de los 95 millones de toneladas, pero con variaciones territoriales importantes y algunas Comunidades Autónomas todavía en decrecimiento. Se confirma así el cambio de tendencia y, tras 8 años de retrocesos muy importantes, el sector volvió a crecer, aunque los volúmenes de consumo sean todavía claramente muy insuficientes para poder hablar de recuperación, en un sector tan castigado por la crisis. Estas tendencias son muy similares a las registradas para los sectores afines.
Para 2016, las noticias son contradictorias ya que el parón licitador de las Administraciones (-21,3% en 2015), en especial en obra civil, compromete las perspectivas de reactivación. Por otro lado, los indicadores relacionados con edificación (visados, viviendas iniciadas, precio de la vivienda, acceso a la financiación, etc.) están comportándose positivamente, lo que inducirá el alza de la demanda. Según Euroconstruct se estima que en 2016 puede haber un repunte de la construcción al +4,4%, siempre que el parón postelectoral no tenga una incidencia excesiva, y un crecimiento del 4% en 2017 y 3,3% en 2018.
La licitación retrocedió el 21,3%
Según el último informe sobre licitación pública de SEOPAN, correspondiente a diciembre de 2015 (provisional), se ha confirmado el importante retroceso licitador previsto desde los primeros meses del año, con una reducción acumulada total del -21,3%, alcanzándose los 10.237 millones de Euros para el conjunto de Administraciones, distribuidos como sigue: Administración General del Estado un -20,1% (4.964 MEuros), las Comunidades Autónomas un -4,1% (2.637 MEuros) y las Locales un -34,8% (2.636 MEuros). Estos datos muestran a las claras la debilidad de la capacidad licitadora e inversora de la Administración General del Estado y de las Administraciones Locales, que están arrastrando al conjunto de la licitación.
La evolución por tipos de obra, muestra que la edificación decrece el -7,0% (3.058 M€), con un comportamiento negativo del -35,2% en vivienda y con cifras muy bajas (212 M€), del -22,3% en equipamiento social (1.365 M€) y crecimiento del +23,1% (1.481 M€) en resto de edificación.
En cuanto a la obra civil, que experimentó un comportamiento negativo muy destacable, arrastrada por la caída de licitación en transportes, se llegó al -26,1% en su conjunto, se pueden encontrar diferencias sustanciales entre la correspondiente a carreteras – que creció levemente – (+2,3% y 214 M€), mientras que el resto de partidas retroceden. Lo hacen en menor medida, medio ambiente (-1,4% y 247 M€) y puertos (-11,2% y 420 M€), y el resto decrece fuertemente, como obras hidráulicas (-19,7% y 1.243 M€), urbanización (-30,7% y 1.115 M€) y, sobre todo, ferrocarriles (-58,3% y 1.251 M€).
La distribución territorial muestra, en el total del año, decrecimiento en once Comunidades Autónomas – Extremadura (-62,5%), Andalucía (-42,5%), Murcia (-40,5%), Cantabria (-39,9%), La Rioja (-35,0%), Castilla – La Mancha (-31,6%), la Comunidad Valenciana (-24,3%) Cataluña (-21,6%), Madrid (-21,2%), Asturias (-17,2%) y el País Vasco (-0,3%). Crecen de forma más importante Canarias (+5,4%), Galicia (+25,0%), Aragón (+34,4%) Islas Baleares (+41,8%), Castilla y León (+43,3%) y, sobre todo, Navarra (+99,3%).